Rayo 3-1 Getafe, La Grada
Sobrevivimos a las fiestas navideñas, no sabemos cómo, porque los fiestones que nos hemos pegado han sido legendarios, como siempre, en Familia, más aún en tiempos de dura represión en los que la unidad es más necesaria que nunca. Recordando a nuestro hermano preso, dimos la bienvenida al 2013, que para los que celebramos la auténtica Nochevieja en pleno agosto no supone mucho más que la vuelta de la competición, que no los horarios dignos.
Una vez más nos tocaba jugar en lunes, aunque el calendario nos regaló un festivo, lo que posibilitó a todos los seguidores rayistas (y visitantes, aunque no hubo ni uno solo en nuestro estadio) acudir al campo, por lo que volvía de nuevo ese ambiente que nunca debería dejar de tener Vallekas.
Antes de que el balón rodara, minuto de silencio por la madre de Sandoval, a cuyo entierro acudieron varios miembros en representación de Bukaneros y al que quisimos demostrar nuestro cariño en estos momentos duros. Desgraciadamente, justo el mismo día del partido fuimos conocedores del accidente mortal que le costó la vida a Andrés, joven socio rayista de 10 años perteneciente a la Peña Planeta Rayista y, pese a hacerla contrarreloj, no faltó su pancarta en recuerdo.
Casi no había terminado el minuto de silencio cuando el Fondo bajaba las pancartas de homenaje y subía las de protesta. Como siempre, enhorabuena a todos los socios por la predisposición, ayuda y gran eficacia en la ejecución de las pancartas, así como a la hora de secundar la acción de cinco minutos de silencio en protesta contra el fútbol moderno y sus lamentables horarios, pero también por el enésimo capítulo avergonzante vivido en el seno de la entidad: un comunicado que acordamos la Plataforma ADRV con la plantilla, un presidente que primero mete su hocico para modificarlo a su antojo y después directamente censura todo el comunicado, y unos jugadores sumisos ante los métodos mafiosos de estos dirigentes que sufrimos a diario.
Silencio sepulcral en todo el estadio que sirvió de nuevo para hacer ver a los cenutrios que se sientan en el palco, y a los que manejan los hilos de este deporte, que no hay nada más triste que un partido sin afición, sin ambiente, y por supuesto sin ultras.
Con la cuenta atrás finalizaba la protesta y comenzaba una animación de esas que ‘enchufan’ a los futbolistas, tanto que a los pocos minutos nuestro equipo se ponía por delante en el marcador. La fiesta estaba servida. Las banderas no dejaban de moverse en todo el partido, costumbre que no solo no debemos perder, sino que tenemos que mejorar aún mucho más. Para eso están los estandartes, los banderones, el material de grada, para no parar de mostrarlo con orgullo durante los noventa minutos, más aún si nuestro rayo nos regala el segundo gol antes de la media hora. Apoteosis.
En Vallekas celebramos los goles de forma especial, casi siempre agachándonos y levantando todo el material de grada, o andando de un lado a otro, o saltando… Esta vez, siendo el minuto 30, lo celebramos acordándonos de la familia de Martín Presa, que para eso somos gente educada. Ver cómo marca tu equipo el 2-0 y todo el estadio canta el ‘Presa vete ya’ nos hace ver que, por encima de resultados deportivos, esta afición está cansada de unos tipejos que demuestran cada día no solo su inutilidad, sino también su nulo respeto hacia la masa social que deberían defender.
Podrá seguir mintiendo, intentando hacer ver en los medios que somos «solo un sector», pero que tenga algunos pelotas a su alrededor no hará cambiar la opinión casi unánime de los rayistas. De uno de esos pelotas nos acordamos especialmente y es que Paco Peco, que ya no pinta nada ni en la Federación de Peñas, ha vuelto a cambiar de chaqueta con la misma facilidad con la que hinca las rodillas…
La segunda parte la iniciamos como viene siendo habitual desde hace tiempo, con denuncia social. No podemos ni debemos ni queremos vivir al margen de la grave situación que sufrimos, y menos aún de sucesos como los ocurridos en Málaga, con dos currelas muertos tras quemarse a lo bonzo. Ya sabemos que el capitalismo no tiene salida, pero existen salidas, la de la lucha, la de la unidad, por ello este mensaje hacia toda nuestra clase, la obrera.
No nos quedamos en eso. Entendemos la militancia como algo activo, con su visualización en ele stadio, pero también en la calle, por ello los días previos algunos miembros del grupo salieron de forma espontánea durante la cabalgata de nuestro barrio para denunciar no solo estos casos de Málaga, sino todo lo que estamos sufriendo en un sistema inviable dirigido por corruptos y chorizos.
Estamos en una situación tan importante que traicionaríamos nuestras ideas si no canalizamos todo eso, al menos, a través de unas pancartas en nuestra grada que sabemos que están alcanzando un increíble recorrido social y mediático, aunque ello nos convierte en enemigos número 1 del sistema.
No nos escondemos en ningún tema, mucho menos a la hora de denunciar el secuestro de Alfon. Si querían tenerlo de dos a cuatro años en prisión preventiva, con el régimen brutal del FIES, sin ni siquiera haber sido juzgado, que no pensaran que nos íbamos a olvidar de él. Todo lo contrario, seguimos denunciándolo como en cada partido y utilizando para ello las vergüenzas que cada día se dan en esta gran ‘democracia’, como los casos del Madrid Arena o la liberación de Carromero (y todavía hay quien necesita irse a otros países para hablar de presos políticos cuando las mazmorras de este estado están llenas de ellos).
Más allá fue nuestro Komando Tifo. Si Alfon no podía estar animando desde su Fondo, al menos estaría presente en forma de gran banderón con su rostro que no dejó de moverse, para emoción de algunos familiares que vivieron el partido con nosotros en la grada. Su familia de sangre y la otra que él eligió, unidas por su libertad.
Por encima de resultados, de categorías, de todo, incluso del propio equipo, para este grupo siempre ha estado y estará su gente. Si tocan a uno de los nuestros, nos tocan a todos, y esa consigna debe estar, lo está, tatuada a fuego en todos nosotros. ‘Hermano’, ‘familia’, términos tan utilizados y casi siempre tan vacíos, perdiendo su auténtico significado, ese que estamos demostrando que sigue más vivo que nunca en Bukaneros.
Y ganamos 3-1, y animamos (con el respeto como siempre al rival y su afición, aunque esta en ocasiones aún muy presentes no lo fuera con nosotros), y volvió a retumbar La Vida Pirata con el estadio ya vacío, y Vallekas se fue sabiendo que la salvación está más cerca, y soñando con que ese Rayo-Liverpool que cantábamos incluso en Segunda B quizá sea menos quimera.
